Cerrar

Volver a la sección Blog

El impacto de la construcción en la biodiversidad es enorme. Los edificios son un problema para la sostenibilidad pero pueden formar parte central de la solución y de un futuro próspero y equitativo. Apostar por la sostenibilidad en la construcción ya no es una opción, sino una necesidad, de ahí que actuar en la descarbonización de edificios a lo largo de todo su ciclo de vida, en sus fases de construcción y uso, supondrá construir un futuro de cero emisiones netas. CONSTRUMAT 2024 nos dejó claves en sostenibilidad donde poner el foco y en la edición de 2025 la descarbonización volverá a ser protagonista.

Pongámonos en contexto y tomemos conciencia de la dimensión a abarcar y el problema a atajar. Los edificios son responsable del 36% de las emisiones de gases de efecto invernadero, GEIs, y del 40% de consumo final de energía en la UE. La construcción y operación de edificios representan una gran parte del uso de recursos naturales (alguno tan escaso como el agua), incluyendo materiales como cemento, acero y madera.

De todos los retos que tiene el sector de la edificación, sin duda, el principal es el de la descarbonización que implica la reducción drástica y urgente de los gases de efecto invernadero. No caben excusas o atajos, no podemos hacernos trampas porque la afectación sobre el clima y la atmósfera es directa y existe un objetivo final que no es otro que mejorar la calidad de vida de las personas.

Muchas veces pensamos únicamente en la fase de la construcción del edificio, pero a efectos de emisión de carbono a la atmósfera, la mayor parte, un 70%, corresponde a la fase de uso. Para esta segunda etapa, afortunadamente, la tecnología para conseguir el confort mitigando las emisiones está muy desarrollada y nos permite reducir la demanda y emplear energías renovables.

La reducción de la demanda en la edificación optimiza el consumo energético, disminuye la huella de carbono y reduce costes operativos. Esto se logra con un diseño eficiente, aislamiento térmico y el uso de materiales sostenibles y tecnologías eficientes contribuyendo a edificaciones ambientalmente responsables. Muchos ejemplos se pudieron ver en CONSTRUMAT.

Las energías renovables en la edificación reducen la dependencia de combustibles fósiles, disminuyen las emisiones de carbono y promueven la sostenibilidad. Integrando tecnologías como paneles fotovoltaicos, aerotermia o geotermia, los edificios pueden generar su propia energía limpia, mejorando su eficiencia energética y contribuyendo a un entorno más saludable y menos dependencia.

En definitiva, todo parece indicar que nos acercaremos a las cero emisiones durante esta fase de uso si cumplimos con los objetivos políticos de ‘rehabilitación masiva’. La rehabilitación energética del obsoleto parque de viviendas español (se estima que hay más de 20 millones de viviendas con una certificación energética de E, F y G) se vuelve imprescindible dado que está muy por debajo de los estándares que exige Europa. Esto significa que más de un 80% de los propietarios deberán acometer renovaciones energéticas urgentes para cumplir con las nuevas directivas europeas.

Reducir la huella de CO2

Debemos preguntarnos: ¿cuál es la huella de CO2 de los materiales, de las técnicas constructivas y de los sistemas de acondicionamiento del edificio?

El carbono embebido, que proviene de la energía y emisiones asociadas a la extracción, producción, transporte y construcción de materiales, se convierte aquí en el gran problema. Este carbono representa una parte significativa del impacto ambiental de un edificio y para hacer frente a esa descarbonización, por lo tanto, es necesario abordarlo y aplicar una perspectiva de ciclo de vida que considere todo el proceso, desde la fabricación hasta la demolición, para minimizar las emisiones totales. Aplicar esta visión en una hoja de ruta con estrategias y palancas es crucial para lograr edificaciones más sostenibles y reducir la huella de carbono global del sector. El futuro será mejor si es sostenible.

¿Cómo actuar? Las vías de actuación en descarbonización

Es muy importante resaltar que todo este proceso, que tiene mucho que ver con rehabilitación integral, con biodiversidad, con sociedad resiliente y con la economía circular, debe hacerse poniendo a las personas en el centro y considerando un aspecto tan básico como el impacto en la salud humana.

Para abordar estos desafíos de manera efectiva, es esencial comprender los factores que influyen en la salud y que todos los actores involucrados (Administraciones, técnicos e industria) reconozcan y enfrenten estas estrategias de manera colaborativa y multidisciplinaria.

Así se dejó ver en el Sustainable Building Congress organizado en el marco de CONSTRUMAT 2024, un foro de conocimiento y tendencias del sector, que contó con más de 50 ponencias y 15 mesas redondas y la participación de más de 120 expertos internacionales. Un evento imprescindible para todos los profesionales implicados en este desafiante, pero también muy prometedor, reto de transformación del sector. Ya existen referencias inspiradoras y reales. Ven a conocerlas en la edición de 2025 que tendrá lugar en Barcelona del 20 al 22 de mayo.